oceano audiovisual s.l.

3 nov 2011

Pescando con Nestor Santos



Todos sabemos que la pesca es un deporte incierto, es un deporte que necesita bastante dedicación para poder llegar a entenderla levemente, ya que,como en la vida misma, nunca se deja de aprender.
Tras mi experiencia compartiendo singladura con pescadores amigos, he podido observar que hay personas que tienen un instinto especial para "leer" el mar, uno de estos amigos es Néstor Santos, un pescador innato a quien le dedico este breve articulo.
Onubense de pura cepa, conoció los fondos a muy temprana edad, cuando acompañado por su amigo Budi se sumergía en los espigones y pecios para hacerse con lo que serian sus primeras capturas y su primer contacto con el medio marino.
Siempre se ha dicho que detrás de un gran hombre hay una gran mujer....y bien es cierto que sin el apoyo de la que ahora es su esposa "Manoli", este gran pescador no podría haberse consolidado como tal, ella, en nuestras distendidas charla en el club náutico de Punta Umbría, evoca dulces recuerdos de pesca a lomos de la zodiac que pilotaba sobre el pesquero donde, por aquel entonces su novio Néstor capturaba meros, lubinas, corvinas, pargos...y demás especies del litoral onubense..
Con toda esta experiencia como buzo..Nestor Santos pudo hacerse un esquema del comportamiento de estas especies..recuerdo en una conversación a bordo de su barco, como me comentaba que había días en los que se sumergía solo para observar a estos habitantes marinos desde cerca, analizando y aprendiendo sobre sus vidas,sus movimientos, su alimentación....
Sin duda una faceta que le hizo pensar aveces como los propios peces y que hoy en día utiliza en sus salidas de pesca.
Néstor en la actualidad, prepara sus jornadas a conciencia, dice que a quien madruga Dios le ayuda, y en su caso es cierto porque uno de los momentos que el mas recomienda para conseguir buenas capturas es el amanecer..aunque no descarta el atardecer y los repuntes de marea.
A bordo de su embarcación "las manuelas II" , una Jeanneau de 7.50 propulsada con un Yamaha de 250 caballos, cada vez que tiene ocasión se hace a la mar, en aguas del Atlántico frente a las costas de Huelva.
Su pasión es la lubina, que captura con vivo o con señuelos, pero también es un gran experto en capturar grandes dentex gibossus (pargos o samas) de tamaños que han llegado a pesar hasta 17 kilos.
En ocasiones, cuando este que os habla le acompaña en sus jornadas de pesca para dejar constancia en vídeo de su buen hacer, me he encontrado con picadas dobles, e incluso triples de pargos enormes e incluso mas de una vez he tenido que intervenir y sacar al pescador que llevo dentro combatiendo con algunas de sus cañas y haciendo todo lo posible por no perder ni mi captura ni la de Néstor, enfocando a veces con la cámara en una mano y algún pargo o corvina de gran porte en el extremo del hilo de mi caña...buenos recuerdos sin duda.
Anécdotas aparte os diré que nunca conocí a alguien con tanto temple a la hora de combatir un pez, ¿como se puede mantener la calma cuando tienes enganchada una corvina de 25 kilos en una linea del 0.30?¡ ...la respuesta esta en la naturaleza de nuestro protagonista, conoce bien los movimientos del pez, sus costumbres, y cuenta con la experiencia de muchos años de pesca y muchas horas de navegación recorriendo las costas onubenses y esto es algo que no se hace en un día..